El gato British Shorthair también se conoce como gato británico de pelo corto y es una de las razas felinas más interesantes, incluso de las de mayor antigüedad. Además, es uno de los gatos que disfruta de mayor popularidad dentro de Gran Bretaña, aunque ha sabido conquistar fieles en otras partes del mundo gracias a su belleza, resulta interesante conocer al respecto.
El British Shorthair es un gato de gran antigüedad, varias teorías señalan que sus ancestros eran de Egipto, los cuales fueron llevados por los invasores romanos hasta Gran Bretaña, con el objetivo de invadirla, esto fue en el primer siglo a.C. Posteriormente, los gatos egipcios fueron cruzados con los gatos propios o autóctonos de Gran Bretaña y fue así como surgió el British Shorthair, un felino de constitución robusta y con un pelaje de gran densidad, el cual le permitía protegerse del clima lluvioso y húmedo.
Se considera que la morfología de esta raza felina no ha tenido grandes variaciones, luego fue cruzado con los gatos persas para obtener el British Longhair, es decir la variedad de pelo largo. Cabe destacar que, durante la Segunda Guerra Mundial la cría del British Shorthair se redujo considerablemente y con ello el número de ejemplares, poniendo en peligro la raza. Sin embargo, una vez culminó la guerra, la crianza fue reanudada y para el año 1970, disfrutaba de un gran reconocimiento.
El British Shorthair es un gato con un cuerpo compacto, equilibrado y robusto, el pecho es amplio y las patas son cortas. En cuanto a la cabeza es de forma redonda, las mejillas son bastante redondeadas y en medio de las orejas, las cuales son redondas, hay una distancia considerable.
La nariz es corta y los ojos tienen un buen tamaño. Las hembras suelen verse un poco menos robustas que los machos, ya que estos tienen una barbilla de mayor tamaño, las hembras también pueden pesar hasta 2 kg menos que los machos, pero estas diferencias se notan cuando el gato alcanza la madurez sexual y el desarrollo se hace completo, esto sucede a los 3 o 5 años de vida.
En cuanto al pelaje del gato British Shorthair, como su nombre lo indica es corto, también es bastante denso y firme y se mantiene pegado o ceñido al cuerpo, de hecho tiene un aspecto afelpado, el cual lo hace lucir como si se tratara de un oso de peluche. En términos del color del pelaje, esta raza felina ofrece ejemplares de distintos tonos, siendo el azul el más característico de la raza, el tono de azul puede ser claro o medio, no incluye marcas de otros colores y el color de los ojos suele ser dorado o cobre.
También el color ahumado, en este caso implica varios tonos grisáceos, además del negro. Igualmente el blanco puro con algunos toques amarillentos y las almohadillas de color rosa, mientras que los ojos en este caso pueden ser de color oro o cobre, zafiro profundo y azul. Otro color del pelaje del British Shorthair es el rojo, así como crema en tonos claros.
El British Shorthair es un gato amistoso, alegre, sociable y cariñoso, también es muy tranquilo y silencioso. Le agrada en gran medida recibir el cariño de sus dueños o de su familia, siendo un felino realmente leal, es un minino que disfruta la compañía de las personas.
En suma, esta raza felina también se lleva muy bien con otros gatos y hasta perros, así como con otros animales de compañía que sean de tamaño pequeño. Por supuesto, esto siempre funciona siempre y cuando se garantice la correspondiente etapa de socialización desde que es cachorro.
Asimismo, el gato British Shorthair es un gato que se lleva muy bien con los niños, gracias a su carácter alegre y equilibrado. Entre otras cosas, esta raza felina es estupenda para la vida dentro del hogar, por supuesto teniendo todas las condiciones para ello, como espacios para jugar y entretenerse, trepar, esconderse y afilar sus uñas.
De la misma forma que otras razas felinas, el British Shorthair puede verse afectado por varios problemas de salud. Para comenzar, su cuerpo voluminoso ejerce un impacto considerable en sus huesos y articulaciones, por ello es usual que padezca enfermedades articulares. También, el British Shorthair puede padecer de enfermedad renal poliquística, estos quistes en los riñones aparecen como un problema de tipo hereditario y en la edad avanzada.
En este sentido, conviene hacer una evaluación para detectar si el gato tiene tendencia a esta enfermedad, a través de un examen por ultrasonido, desde la décima semana de vida. De igual manera, la salud del British Shorthair puede verse afectada por enfermedades cardíacas como la miocardiopatía hipertrófica, además de complicaciones en la sangre como la hemofilia B.
Por ello es tan importante acudir al veterinario cada 6 o 12 meses, para poder hacer el control respectivo y evitar cualquier enfermedad. Además de llevar a cabo el proceso de desparasitación a nivel interno y externo y cumplir con el calendario de vacunación.
El gato British Shorthair necesita de cuidados realmente simples para garantizar su total bienestar, comenzando con garantizarle una cama cómoda, rascadores, juguetes y otros elementos relacionados. Además, es esencial atender aspectos como su alimentación e higiene, los detalles a continuación.
El alimento debe ser completo y del mayor nivel de calidad, una opción que le ofrezca todos los nutrientes que necesita. Ahora bien, es importante dosificar correctamente la comida de esta raza y no dejar alimentos a su completa disposición, para evitar que pueda desarrollar obesidad.
No es necesario bañar al British Shorthair, ya que ellos se limpian a sí mismos. Esto solo se hace necesario si el gato está demasiado sucio o si tiene una infestación parasitaria. En suma, es fundamental mantener limpios los lagrimales del British Shorthair.
También limpiar los restos de suciedad que puedan quedar en su boca. Para ello es necesario utilizar una gasa húmeda con suero, clorhexidina diluida o en su efecto, con manzanilla. Igualmente es preciso limpiar la boca y las piezas dentales de esta raza felina.
Esto se debe hacer desde que es un cachorro, para que el minino se acostumbre a esta rutina e incluso permita cumplir con ella, va bien limpiar entre 2 y 5 veces por semana. En suma es vital la limpieza de las orejas, ya que allí se acumula gran cantidad de suciedad, se debe utilizar una gasa, también para descartar la presencia de ácaros.
El pelaje del British Shorthair es corto, pero esto no impide la necesidad del cepillado, con el objetivo de eliminar la suciedad, el pelo muerto y así garantizar que se mantenga en las mejores condiciones. Conviene hacerlo 2 o 3 veces a la semana.
No es necesario cortar las uñas del British Shorthair, ya que el mismo minino se las lima, para ello es preciso proporcionarle un rascador. Sin embargo, hay ejemplares que pueden dejar de usar dicho rascador cuando estén enfermos o cuando llegan a la vez, allí es cuando se deben cortar sus uñas.
Las primeras lecciones de vida del British Shorthair como de cualquier otra raza felina, son aprendidas junto a su madre durante los dos primeros meses de vida. Posteriormente, es esencial hacer énfasis en la socialización, es decir, ese proceso en el que se acostumbra al felino a estar en presencia de otros gatos y animales y por supuesto, cerca de personas así como de diversos objetos.
Este felino es sin duda un gato interesante, está asociado a un conjunto de características realmente interesantes y curiosidades sorprendentes, estas a continuación:
● Es el gato típico de Inglaterra, allí tiene el primer lugar de popularidad dentro de las razas felinas.
● El primer acercamiento importante hacia esta raza, se llevó a cabo en el Crystal Palace de Londres en el año 1871, durante una exposición del artista Harrison Heir. De hecho, fue la primera vez que esta raza formó parte de una competencia y se llevó toda la atención, superando al gato persa.
● La Segunda Guerra Mundial estuvo cerca de extinguir al gato British Shorthair, esto condujo a la necesidad de incluir al gato persa en las líneas de crías y esto contribuyó a obtener las características que tiene la raza en la actualidad. Por ejemplo, un cuerpo de mayor robustez, un cuerpo de formas redondeadas y ojos de color más intenso, esto también dio lugar a la variedad del Longhair, es decir el gato de pelo largo.
● El famoso gato personaje de Alicia en el País de las Maravillas, fue creado con la inspiración en un British Shorthair.
En conclusión, este felino es uno de los más interesantes y de hermosa apariencia, desde sus orígenes antiguos, ha sido uno de los gatos favoritos de muchas personas, quienes se rinden ante su personalidad cariñosa.
